El proyecto tuvo su comienzo en la Escuela Nº 73 Justina Portas de Otero, ubicada en la localidad de Utracan, cuando en la hora pedagógica de Nivel Inicial la maestra le propuso reconocer plantas aromáticas a los estudiantes. Durante el desarrollo esta actividad surgieron muchas preguntas una de ellas fue si las plantas solo nacían por semillas, a lo que docentes decidieron dar otra propuesta. La misma consistió en realizar nuevas plantas con una manera particular de reproducción.
En primer instancia, en un cajón de madera los niños colocaron abono orgánico, luego los docentes le explicaron a los niños cómo elegir y preparar el esqueje que posteriormente plantaron en el cajón. Con este tipo de actividad, los profesores pudieron comprobar que la mayorías de los estudiantes tenían fresco algunos de los saberes previos abordados por los espacios curriculares de Ciencias Naturales y Educación Agraria.
Las indagaciones de los niños, sostienen los profesores, tenían que ver en su mayoría con la ansiedad por saber cómo lograr que las plantaciones crecieran rápido. Es así como surge el proyecto de la elaboración de un enraizante de lentejas.
Tras una investigación y después de varios intentos, se logró con éxito el enraizante orgánico tras comprobar que funcionaba con los esquejes de romero. El compuesto consiste en dejar reposar las lentejas en agua, hasta lograr su germanización y mediante ella, la legumbre libere auxinas, responsables de regular el crecimiento vegetal.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.