En letras negras, sobre la pared roja recién pintada del SUM de nuestra escuela, alguien ese fin de semana había escrito: HAY BALAS PA TODOS, cuatro palabras que encerraban un mensaje cargado de violencia, de rabia contenida, que nos paralizó a todos, pero sobre todo impactó mucho a los chicos. Pintar era ocultar...hacer de cuenta que nada había pasado y no era eso lo
que queríamos transmitir ni enseñar. Debíamos trabajar con esto que nos pasó, para
reconvertir ese mensaje duro, frío, desesperanzador y violento en algo diferente.
Y toda la escuela, con los profesores y alumnos de la orientación en ARVIS a la cabeza puso manos a la obra. La idea de pintar un mural, sin taparlo ni negarlo, sino apropiándonos para
darle un nuevo sentido comenzó a ser parte de un proyecto que involucró a toda la escuela. Así, desde diversas áreas, como Construcción de Ciudadanía, artística y materias de la orientación empezaron a surgir bocetos que se unían, se enlazaban, se complementaban hasta conformar un proyecto final: un mural donde el “Hay balas pa todos” transmute en un mensaje diferente, lleno de vida, de color y de esperanza; esas letras negras, gracias a los pinceles de toda la escuela ahora nos miran desde la pared del SUM diciendo: HAY IGUALDAD; porque ese fue el mensaje que los chicos quisieron transmitir, no solo a quienes integramos la comunidad educativa...sino también a aquellos que los fines de semana juegan al fútbol en nuestro patio.
que queríamos transmitir ni enseñar. Debíamos trabajar con esto que nos pasó, para
reconvertir ese mensaje duro, frío, desesperanzador y violento en algo diferente.
Y toda la escuela, con los profesores y alumnos de la orientación en ARVIS a la cabeza puso manos a la obra. La idea de pintar un mural, sin taparlo ni negarlo, sino apropiándonos para
darle un nuevo sentido comenzó a ser parte de un proyecto que involucró a toda la escuela. Así, desde diversas áreas, como Construcción de Ciudadanía, artística y materias de la orientación empezaron a surgir bocetos que se unían, se enlazaban, se complementaban hasta conformar un proyecto final: un mural donde el “Hay balas pa todos” transmute en un mensaje diferente, lleno de vida, de color y de esperanza; esas letras negras, gracias a los pinceles de toda la escuela ahora nos miran desde la pared del SUM diciendo: HAY IGUALDAD; porque ese fue el mensaje que los chicos quisieron transmitir, no solo a quienes integramos la comunidad educativa...sino también a aquellos que los fines de semana juegan al fútbol en nuestro patio.
(Texto provisto por el equipo expositor)
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